miércoles, 24 de octubre de 2012

martes 23: 29

Un amigo hizo una lista en su cumpleaños. Ayer escribí 29 posibles aprendizajes, valoraciones, recordatorios, anuncios.

1. Nunca voy a estar en el lugar de otra persona por eso merece mi respeto
2. Por momentos mi vida se alinea con otras. Debo notar cuándo sucede y estar
3.Lo conocido te vuelve a sorprender, sean lugares o personas o tú mismo, es tu decisión dar esa pauta
4. Me gusta el color verde, me gusta tomar agua
5. Celebro dos años de haber encontrado mi pasión
6. Quiero vivir y dejar vivir
7. El camino que deseo en la escritura parece largo pero yo me siento cada día más fuerte
8. Me levanto temprano y me acuesto tarde y quedo con las ganas de hacer más
9. Me gusta la persona que veo en el espejo, me sonríe más seguido
10. Mi papá es mi amigo
11. Mi mamá es mi amiga
12. Mi hermano se preocupa por mí
13. Mis amigas me siguen aceptando como soy
14. Disfruto estar sola
15. Disfruto manejar en carretera
16. A veces Dios guiña el ojo y yo lo veo
17. Siempre puedes ser mejor persona
18. Reconozco a mis abuelos, a mis padres, a mis hermanos, a mis amigas y a mi tierra en mí; no soy sin ellos.
19. Disfruto cocinar y lavar los platos
20. Disfruto correr y sudar
21. Los vicios me aburren después de tres días
22. (No sé si todo tiene una razón) pero sí intento darle un sentido de necesidad a lo que sucede
23. El cambio me cuestiona, me empuja, me tira, me llena de energía
24. Me libero de las ideas negativas de mi pasado
25. Para cuando pienso en el futuro, ya es
26. Tengo salud: me corre por las venas, me sabe en la boca, la veo en lo que veo
27. Cada día estoy más cerca de ser constantemente la yo que disfruto
28. Mi imaginación es una nube blanca que cambia de forma con mis ideas y mis deseos, cuando se vuelve gris es solo para regar la tierra y hacer crecer mis árboles de sueños
29. Quiero seguir viviendo, seguir escribiendo

jueves, 18 de octubre de 2012

disfruto

estar desnuda
nadar por debajo del agua
picarle a la comida mientras cocino
tomarme un whiskey solo y sola
o una copa de vino leyendo
tocarme
probarme la ropa de mi mamá
viajar a un lugar nuevo
descubrir un puesto de comida
escoger fruta
pintar con mis hermanitos
escoger un sabor de nieve o raspado
escuchar música mientras veo el techo
salirme a leer a las cinco de la tarde
tomar agua
bailar
oler un platillo, adivinar qué es lo que tiene
escuchar la conversación íntima de una pareja o grupo de amigos
imaginar
pararme de puntitas para ver, agacharme para ver
deshacer un nudo
masticar el chicle mal cuando nadie me ve
escupir desde lo alto de un edificio
escribir
leer
escribir y leer
leer, escribir
¿me lees?
te escribo
y me escribo también


jueves, 11 de octubre de 2012

indiferencia

de haberme sentido semilla
de haber comenzado a lanzar raíz
de sentir como puede crecer mi tallo
como se formarán mis hojas
de imaginar mis flores, mis frutos,

me vuelvo una margarita de plástico
llena de tierra
olvidada en un almacén
entre luces blancas
cajas de cartón
y cinta adhesiva
incrustada a un pedazo de verde
de un material sin nombre

espero que vuelva mi yo
 me abandonó

ahora soy de plástico
observo
la vida parece una imagen estática
formas sin fondo

no siento energía ni dentro ni fuera de mí

me olvido en el abandono

han matado a tu padre,
tu hermano está muerto,
tu mamá nunca quiso tenerte,
y él te es infiel,
todo es lo mismo, nada me altera,
ninguna muerte me hace sentir viva
ningún desamor me hiere
estoy atrapada en un cuerpo vacío
en una mente desierta
ausente

sonrío y miento
hablo y miento
callo y miento
miento y miento

la indiferencia se vuelve mi yo
y yo me ignoro en el miedo

martes, 9 de octubre de 2012

relojes

En electrodomésticos, ¿de quién fue la gran idea? "hay que poner un reloj en la cafetera", "y en el microondas", y todo aquello que conectamos y desconectamos para que el reloj esté por siempre parpadeando.

Así el microondas acentúa la relatividad. Y la cafetera tiene razón son las 12:09 en algún lugar del mundo pero casi nunca en tu cocina.



domingo, 7 de octubre de 2012

libro: Life of Pi

Desde que algunas personas saben que estudié algo relacionado con libros, me preguntan, ¿qué me recomiendas leer?

Puedo creer que es inútil recomendar un libro. Tienes que haber leído varios, conocer a la persona que te pide la recomendación y hasta hacer unas recomendaciones de lectura para el momento en que la persona lee tu recomendación: por si es un libro lento; o si suceden varios acontecimientos antes de llegar a la historia (explicar que suceden varios acontecimientos antes de llegue a la historia); si hay una cantidad de personajes, que la persona no se preocupe por memorizar quién es cada quién; o si contiene un lenguaje muy específico, que no se preocupe por buscar cada palabra en el diccionario: etcétera.

También me han recomendado varios libros. Es por azar que decido qué leer, si me salta el libro en una librería y hace poco me hablaron de él; si lo traigo en la cabeza y he ido a tres o cuatro lugares a preguntar entonces me obsesiono; si me lo regalan; si me lo regalan y extraño o pienso en la persona que me regaló (entonces lo leo). Decidí de dejar de comprar libros hasta no leer los que tengo, he disminuido mi compra pero no logro cumplir mi propósito.

Acabé de leer uno que me regaló un inglés que visitó el DF por primera vez, me lo dio en muestra de su agradecimiento, se quedó en mi departamento. Le tocaron días soleados, que fue lo que más apreció viniendo de un clima gris.

Me costó trabajo decidirme a leerlo: Life of Pi, la portada tiene tonos pasteles, un dibujo de un tigre y un niño (tipo Mowgli de El libro de la selva) dentro de un barco.

Lo terminé ayer.

Me gustó. Si tuviera que darle una calificación general (subjetiva, en la que tal vez le doy medio punto más solo porque no quiero menospreciar el regalo): Un 7 (de 1 a 10).

No me ha cambiado la vida. Hay libros que me han llevado a buscar un cambio (no me la han cambiado en sí), pero éste no es. El lenguaje es sencillo, está escrito en primera persona como a manera de diario, casi puede sentir que cada capítulo es un día más en la vida de Pi (o Piscine, el nombre del protagonista y narrador).

Hay reflexiones en torno a la vida animal. Cambió mi perspectiva acerca de los animales que viven en los zoológicos. Para un animal vivir en un zoológico no implica estar preso. Si es un buen zoológico por ejemplo San Diego Zoo, los animales vivien en un hotel con servicio al cuarto, de comida y limpieza. Los animales salvajes en su medio viven en un continuo estrés, solo aquellos que están en la cúspide de su cadena alimenticia están más relajados (tal vez por eso vemos a los leones bostezando en los documentales de nat geo). Si es un zoológico descuidado o mal acondicionado como alguna vez vi a una anaconda en el zoológico del DF enrrollada como serpentina en una pescera de un metro por un metro, el animal sí sufre, pero no necesariamente el zoológico es la cárcel de los animales, como yo pensaba.

También contiene algunas notas de sobreviviencia para aquel que termina en algún bote pequeño del barco que se hundió: qué tipo de animales son más nutritivos y fáciles de pescar, como la tortuga. Datos que no te preguntas hasta estar en una situación como tal. Me quedé con la idea de que la cantidad de trabajo por sobrevivir es muy alta. Tal vez no muy distinta a como llevamos la vida pero por ejemplo no tienes la idea de estar siempre a punto de morir, aunque siempre estamos en el borde de la muerte.

Es un libro de aventura para el protagonista, de búsqueda y de reflexión.

Al final la historia me parece poco verosímil, si fuera más inocente y literariamente menos pretenciosa la hubiera disfrutado más. No logré ponerse en la situación de Pi. Me he vuelto un poco ridícula pero es lo que sucede también con las pasiones cuando te obsesionas. Amo la literatura entonces en cada texto que leo necesito sentir las palabras fluyendo en mis venas. Qué ridícula ¿No?

por amor

Después de dos años y medio de noviazgo, anillo de compromiso adornando el dedo de ella y fecha de boda en el calendario. La pareja por primera vez se sincera por más de dos minutos.

Ella: a ver entonces ¿no tienes dinero?

Él: yo pensé que tu papá tenía dinero

Ella: mi papá hace años lo perdió, tiene un poco y algunos terrenos

Él: pues igual mi familia, hace tiempo dejó de tener dinero, la empresa está deuda y nadie quiere comprarla

Ella: ...

Él: ¿qué?

Ella: pues yo me iba a casar contigo por... tu dinero

Él: pues yo también

Ella: ahora ¿qué hacemos?

Él: entonces tu familia no tiene nada

Ella: pues muy poco para que cuente

Él: ¿y el caserón en el que vives?

Ella: ya se lo anda comprando mi cuñado, mi hermana va a vivir ahí, mi cuñado sí tiene dinero

Él: pues nombre yo creí que tenías dinero

Ella: sí qué decepción, obviamente aquí la dejamos ¿no?

Él: me estabas empezando a gustar

Ella: a mí también, ya te estaba imaginando como el papá de mis hijos

Él: pues si yo también te veía como su mamá

Ella: lo más importante es el dinero

Él: definitivamente

Ella: yo no entiendo a esos locos que dicen que el amor

Él: éso es lo que son ¡locos!

Ella: nomás inventan

Él: por eso luego se andan divorciando

Ella: y se odian luego, luego

Él: ¡un matrimonio basado en el amor!, y luego, ¿cómo comes?

Ella: ¿a qué escuela van tus hijos?

Él: me da risa pues

Ella: ¡ay! a mi también

Él: entonces ¿prefieres que ya no sigamos?

Ella: no sé, la verdad también me siento sola y todas mis amigas se están casando

Él: ¿y no le puedes pedir algo de dinero a tu papá?

Ella: tal vez a mis tíos, ellos han hecho mucho

Él: yo tengo unas ideas de negocio pero mi papá no cree que pueden salir en algo

Ella: podemos intentar, si mi tío dice que sí

Él: hazme una cita con él

Ella: pues vamos viendo si seguimos

Él: tenemos un año para tener dinero

Ella: yo también tengo una ideas

Él: y si nomás no sale la lana pues rompemos

Ella: al menos que yo vea que puedo encontrar a alguien con dinero

Él: y yo también

Ella: eso es lo más fácil

Él: la verdad es que sí

Ella: me dio gusto conocerte

Él: a mí también

Ella: ¿quieres el anillo?

Él: pues es tuyo

Ella: ya me darán otro y tu puedas dar este que no se ve barato

Él: está bueno

Ella: hasta luego

Él: adiós



imagen

Camino a casa 1:32 am. Semáforo en rojo.

Veo por el espejo retrovisor un automóvil tipo judicial o policía americano o mexicano. Un hombre joven con bigote recortado al volante, un hombre atrás que por la oscuridad del carro parece sombra y una mujer con una cantidad de maquillaje considerable en el asiento del copiloto. La mujer parece acercarse una cajita. Observo más tiempo. La mujer inhala algo de ahí, primero con una fosa nasal, después con la otra. Después con su dedo meñique se limpia alrededor de la fosas (cliché). El hombre manejando no voltea a verla. La mujer prende una luz y se observa en un espejo portátil, la nariz y luego los ojos.

Semáforo en verde.

el cuento de nunca acabar

te marqué al celular
cambié de número
te busqué en facebook
me salí
a dónde te mando los documentos
yo te mando un correo para que me los mandes
por qué no fuiste a la cena
nadie confirmó
por qué nadie llegó a la reunión
cambiamos de lugar
no me enteré
te mandé un mensaje
no me llegan los mensajes
tienes whatsaap
no he bajado la última versión
pásame tu bbpin, tengo iphone
pásame tu número
no me lo sé
pásame el tuyo
yo te marco
cuál es tu radio
ya no tengo radio
pásame tu correo
es con guión bajo
todo junto
yo te escribo
te sigo en twitter
a cuál cuenta
te agrego a facebook
mejor te agrego yo
no estoy con mi nombre
ya cambién otra vez
no reviso mi correo
no me he metido hace siglos
no tenía idea que estabas aquí
no he podido contactarla
no he podido contactarlo
se marca con 045
se marca directo
¿te acuerdas del número de la abuela?
ya bajé la nueva versión del viber
qué es viber
cómo te busco en skype
no sé usarlo
por qué no me contestas
por qué me marcas cuando estoy en el cine
por qué no me contestas
por qué me marcas cuando no quiero hablar
por qué no me contestas tú cuando yo te marco
es que no tengo señal
mi celular está bien chafa
no le he puesto crédito
mi plan no me da más minutos
voy a cambiar de compañía
voy a volver al plan de antes
deja tu recado
marca asterisco
cuelga
vi unas fotos en facebook
qué has hecho
nada
a ver cuándo nos vemos

miércoles, 3 de octubre de 2012

idea

Tengo una idea, hay que gritar: ¡tienes razón!, cuando tu mamá diga algo, o mi hermano. Hay que decir que sí cuando el padre habla y que sí cuando el policía infracciona. Sí al presidente, a la maestra de la escuela. Sí por todas partes y sobre todas las cosas.

Después cuando nadie se de cuenta hay que hacer lo que queremos, cantar y decir lo que nos venga, hay que preguntarnos sin respondernos, hay que guardar entre los dos nuestro silencio. Sonreír y no estar de acuerdo.

A día siguiente vuelve a tomar fuerza para gritar: sí tienes razón mientras sabemos tu y yo que es nuestras idea.

algo

Algo saben los demás que nosotros no sabemos. O algo sabemos nosotros que no sabemos decírselo a los otros. No me veas así. Si algo sabes tú es que yo te entiendo. Los demás me confunden. Pero tu me entiendes y yo intento.

martes, 2 de octubre de 2012

a oídas

Reunida en un restaurante con muchas personas que conozco desde hace mucho tiempo y a quienes no veía hace algunos años, escuché un pedazo de la conversación de dos "amigos". No porque no sean mis amigos, pero son conocidos, nos encontramos por casualidad, no nos buscamos.

Todos ahí estábamos ya como adultos: algunos con trabajo en Mexicali, otros con trabajo en el DF, otros trabajando en política y yo sin trabajo.

Escuché al primero de mis "amigos" decirle al segundo cómo un tercero (que no se encontraba ahí) debía pedir más dinero. El partido político en el que está el tercero ha quedado en la presidencia de nuevo, estos dos platicaban de cómo al tercero iba a ir muy bien. El primero comentaba que el tercero debía pedir más dinero o un mejor puesto, que no debía conformarse con poco sino ir por el doble. El segundo de mis "amigos" no decía mucho, nomás respondía: yo no lo veo así. El primero insistía: es que puede pedir mucho más, en lugar de 40 mil pueden ser hasta 100 mil pesos por los que se acomode. El segundo seguía sin decir si estaba o no de acuerdo. Yo pensé en que conocía al primero desde la primaria y que se había convertido en un politiquillo corrupto o eso me pareció en el momento. También pensé "y yo queriendo un trabajo que pague más de 8 mil" que es lo máximo que me han ofrecido (y eso que terminé la maestría).

Finalmente me decidí a escribir esto con la intención de invitar a las personas de mi edad, a mis compañeros de la escuela y a quienes no conozco a que no busquen exprimir sus puestos sino intercambiar sus propuestas por un sueldo decente. Sí tal vez tienen trabajo por 4 o 6 años pero tienen trabajo y tienen el tiempo para pensar en qué sigue.

Me imaginé la escena de este otro modo pero no tuve el ¿coraje? o la ¿locura? que se necesita para representarla en ese momento. Me imaginé levantándome en ese preciso momento en que terminé de escuchar 100 mil pesos, subiéndome a una silla del restaurante y empezar con un monólogo que dijera algo como esto: señores y señoras, jóvenes, les presento a un compañero de la escuela primaria, han pasado muchos años y ahora es abogado. Tuvo la oportunidad de trabajar con el gobierno, en este momento está mencionando que otro amigo que comienza con la oportunidad de trabajar en un puesto de gobierno federal no debe pedir un sueldo o un puesto que baje de 100 mil pesos, ¡100 mil pesos! ¿cuántos sueldos de estos no hay por ahí? ¡cuánto paga cada uno de ustedes que están aquí reunidos por mantener a estos tipos!

Me hubiese encantado hacerlo. Pero también me hubiese encantado haber escuchado a estos dos "amigos" discutir alguna propuesta, reforma o iniciativa; no un sueldo.

Lo último que vi de la escena en la reunión fue como el primero se fue en su carro deportivo y yo me quedé pensando ¿debo escribir algo de esto?