viernes, 28 de diciembre de 2012

inconsciente-consciente


Al centro de mi cabeza hay una mesita donde juegan vencidas mi ser consciente contra mi inconsciente. El inconsciente gana siempre en silencio por lo que a veces no me doy cuenta. Hoy lo caché, exactamente hace un momentito. Mi consciente andaba de fiesta, se quedó jetón porque es viernes y se duerme a las 8:00, ¡en eso me ha convertido mi consciente!, en una anacoreta, bailo sola pero no estoy loca, y habló mucho más (con esto te podéis dar cuenta).

Estoy leyendo una novela de un amigo..., sus personajes son argentinos, se pega el acento, ¿sabés?, pienso que mi amigo tiene papás argentinos, el papá seguramente, pero puede que no... mi consciente toma acción y me está mandando a cerrar esta computadora, mi mejor amiga, pienso en la nostalgia de no escribir en máquina de escribir... pero seguramente también esto reflejará algo, que los escritores cuando comenzaron a utilizar la computadora sus novelas estaban más (o menos) llenas de merde, (qué elegante es blasfemar en otro idioma, para mí misma obviamente no para el del otro idioma), tal vez eso dijeron de quienes empezaron a utilizar la máquina de escribir después de años de utilizar lápiz y pluma.

Bueno pues ya mi consciente dice que debo de ver la película que ya está lista para verse como si yo no pudiera hacer lo que quiero, pero no, tantas veces que no puedo, mi consciente con tu debes de, con permiso.

en la biblioteca

vengo a la biblioteca de mi preparatoria a escribir desde hace un mes y medio, estuve en el proceso de verla llena de estudiantes estudiando para finales, también cuando éramos unos siete u ocho en toda la sala, ahora somos tres.

la que está trabajando en préstamos de libros es... Julia, tiene el pelo rizado, no se sienta cerca del mostrador, usa ropa muy ligera para el frío que se siente y hoy está su novio con ella, ambos ven una película, él la acompaña. Julia se levanta atiende, vuelve a sentarse con su novio, pregunta alguna cosa de la película como si estuviera interesada.

ta vez piensa soy la única trabajando en estos días
tal vez piensa ninguna de mis compañeras de clase trabaja
tal vez piensa en todo aquello que no está haciendo
tal vez piensa en quién soy yo y por qué vengo y qué hago tanto tiempo
tal vez no piensa en nada de esto
tal vez

de vez en cuando Julia se besa con su novio
de vez en cuando Julia habla y sonríe
otras se queda en el silencio, es parte del silencio que habita en la biblioteca

lunes, 17 de diciembre de 2012

schopenhauer

En la lectura de El amor, las mujeres y la muerte, coincido con algunas de sus ideas en cuanto al amor. Estoy en desacuerdo con la mayor parte de las mujeres, pero entiendo que el filósofo es del s. XVIII, como él pudiera entender que soy del siglo XXI y que ya no es real la negación del sexo femenino, no es llevado a un segundo plano.

"(...) nunca he comprendido cómo dos seres que se aman y creen hallar en ese amor la felicidad suprema, no prefieren romper violentamente con todas las convenciones sociales y sufrir la vida, renunciando a una ventura más allá de la cual no imaginan que existan otras." (p. 9)

"(...) el amor no se contenta con un sentimiento recíproco, sino que exige la posesión misma, lo esencial, es decir, el goce físico." (p. 13)

"El egoísmo tiene en cada hombre raíces tan hondas, que los motivos egoístas son los únicos con que pueda contarse de seguro para excitar la actividad de un ser individual." (p. 17)

"(...) cuando es preciso que el individuo obre y se sacrifique por el sostenimiento y el desarrollo de la especie, le cuesta trabajo a su inteligencia, dirigida toda ella hacia las aspiraciones individuales, comprender la necesidad de ese sacrificio y someterse a él en seguida." (ibídem)

"Una vez satisfecha la pasión, todo amante experimenta un especial desengaño; se asombra de que el objeto de tantos deseos apasionados no le proporcione más que un placer efímero, seguido de un rápido desencanto. En efecto; ese deseo es a los otros deseos que agitan el corazón del hombre como la especie es al individuo, como el infinito es a lo finito." (p. 21)

"Cada cual ama precisamente lo que le falta." (p. 29)

"(...) cada cual se esfuerza por neutralizar, por medio de la otra persona, sus debilidades (...)" (p. 31)

"(...) el puro instinto sexual es un instinto vulgar, porque no se dirige a un individuo único, sino a todos, y solo trata de conservar la especie por un número nada más y sin preocuparse de la calidad." (p. 33)

"Solo la especie de una vida sin fin (...)" (p. 35)

"El amor satisfecho conduce también más a menudo a la desdicha que a la felicidad." (p. 40)

"(...) la parte inmortal de su ser es lo que por ella suspira, al paso que cualquier otro de sus deseos solo se refiere a su ser fugitivo y mortal." (p. 47)


Schopenhauer, Arthur. El amor, las mujeres y la muerte. Ediciones Coyoacán. México: 1997.

sábado, 15 de diciembre de 2012

mi cuerpo no tiene techo

a veces me salgo, mientras siento que estoy escribiendo lo que quiero, pero no estoy escribiendo lo que quiero, lo vuelvo a leer y así no lo recordaba, así no fue como pasó en mi cabeza, pasó mejor, siempre mejor, a dónde me voy, tengo miedo, a veces tengo el sentimiento exacto de lo que no podía ver en el presente, como una revelación, por qué no vivo en el mismo tiempo que la mayoría, por qué veo a una persona correr y correr y correr y lanzarse desde una montaña para volar, convertirse en albatros, sus pies ya son plumas, sus brazos, alas.

mi cuerpo no tiene techo y mi alma sale siempre a tomar aire fresco y vuelve tres horas después avergonzada pero trae con ella otras vidas y recuerdos y yo no la puedo no perdonar